Se conoce con el nombre de Sputnik al primer satélite que hizo el disparo de salida para comenzar la larga carrera espacial entre la antigua Unión Soviética y los Estados Unidos, hace ya más de 60 años atrás.
Fue un 4 de octubre del año de 1957, el momento cuando la Humanidad entera quedó pasmada al ver cómo los esfuerzos por colocar exitosamente en el espacio sideral un satélite de fabricación propia, rindieron sus frutos por primera vez en la historia.
Apariencia del satélite Sputnik
Se trata de una esfera elaborada en aluminio del tamaño de una pelota de playa (apenas 58 centímetros de diámetro), con un peso de poco más de 80 kilos, acompañada de cuatro largas y finas antenas.
En su primer viaje, tardó apenas 98 minutos en orbitar la Tierra. Su misión era obtener la mayor cantidad de información posible acerca de las capas altas de la atmósfera y el campo electromagnético del planeta Azul. Dos años más tarde, en 1959, su segunda versión, Sputnik 2, llevaría por primera vez orbitar el espacio a un animal, la famosa perra Laika.
Sputnik para el mundo
Al igual que, pocos años después el primer hombre en la Luna daría ese “gran paso para la humanidad”, en aquella época, Sputnik representó un salto cuántico, si se quiere, para el enorme aparato propagandístico soviético en plena Guerra Fría.
Por lo tanto,fue mucho más que un invento ruso. El satélite permitió trascender las fronteras de la conquista mundial allende el espacio e impulsar aún más, no solo la carrera espacial rusa, sino también la de su férreo adversario estadounidense.
La vacuna Sputnik V
En honor al primer satélite ruso que orbitó La Tierra a finales de la década de los años cincuenta fue bautizada la vacuna rusa Sputnik V, diseñada para combatir la pandemia por coronavirus.
Se trata de la primera vacuna registrada del mundo, basada en una plataforma bien estudiada de vectores adenovirales humanos. A día de hoy, un número de 71 países le han dado el visto bueno a la vacuna Sputnik V contra el Covid, lo que equivale a una población de 4 mil millones de seres humanos.
Sputnik funciona contra el Coronavirus
Diversos estudios médicos han arrojado como resultado una eficacia de esta vacuna de hasta un 97 por ciento. Esto según algunos análisis de datos sobre la incidencia del coronavirus entre los rusos vacunados con ambos componentes del fármaco, al menos en el período comprendido entre el 5 de diciembre de 2020 y el 31 de marzo de 2021.
Sputnik V como vacuna está diseñada sobre una plataforma probada y muy bien estudiada de vectores que causan el resfriado común y al que la humanidad no ha escapado durante milenios. Utiliza un enfoque de refuerzo múltiple, basado en el uso de dos vectores diferentes para dos inyecciones durante el proceso de vacunación.
Dicho enfoque incrementa el nivel de inmunidad y la hace mucho más fuerte en comparación con las vacunas que utilizan el mismo mecanismo de administración para las dos inyecciones.
En conclusión, de las vacunas existentes hasta ahora, la Sputnik V, así como su homónimo fisgón espacial, significan dos de los más grandes avances y aportes a la humanidad de los últimos tiempos.