La luz es una forma de radiación electromagnética. Tiene energía y viaja a 300.000 kilómetros por segundo. La luz puede viajar por el espacio y también hasta la superficie de la tierra. La luz está formada por campos eléctricos y magnéticos que oscilan en todas las direcciones perpendiculares entre sí, moviéndose juntos en una sola onda. La velocidad de la luz depende del medio por el que viaja; por ejemplo, la luz se ralentiza al pasar por el agua o el vidrio porque estos materiales tienen más resistencia que el aire para la misma longitud de onda (frecuencia) de las ondas luminosas. Toda la luz está polarizada cuando hay vibraciones confinadas en un solo plano; en caso contrario, se trata de luz no polarizada que se polariza al atravesar medios anisótropos como los cristales o cualquier material birrefringente como la calcita o la turmalina.”
La luz puede considerarse como ondas electromagnéticas.
En física, la luz es una onda. Sabemos que las ondas tienen una frecuencia y una longitud de onda, pero ¿qué diferencia a una onda de otros tipos de ondas? Las ondas están formadas por campos eléctricos y magnéticos. Si imaginas que el campo eléctrico es como una carga positiva (+), el campo magnético sería como la carga negativa (-). Por ejemplo, si tuviéramos dos imanes (uno con polo norte y otro con polo sur), se repelerían debido a sus cargas opuestas, como los polos positivo y negativo de una pila.
Esto puede entenderse observando sus respectivos campos:
La luz puede tener diferentes cantidades de energía.
- La luz puede tener diferentes cantidades de energía. Al igual que el término “energía” se utiliza para describir la cantidad de trabajo que se puede obtener de un objeto, la luz también puede ser energética o no energética.
- La luz puede ser caliente o fría. Por ejemplo, una hoguera es caliente mientras que el sol en el espacio es frío.
- La luz puede ser rápida o lenta. Más concretamente, algunos tipos de ondas son ondas transversales u ondas longitudinales, ¡eso es todo lo que significa! Si una onda se mueve de izquierda a derecha (como el sonido), es una onda transversal; si se mueve de arriba abajo (como el agua en la Tierra), es una onda longitudinal.
- La luz puede tener mucha o poca energía
La velocidad de la luz depende del medio por el que viaja.
La velocidad de la luz en un medio puede caracterizarse por su índice de refracción, n. El índice de refracción del agua es de aproximadamente 1,3, lo que significa que la velocidad de la luz en el agua es sólo un 30% más lenta que en el aire. Esto significa que si miras a través del agua algo que está muy lejos (por lo que parece muy pequeño), percibirás que se mueve mucho más lentamente que si miras a través del aire algo que está muy lejos (donde parecerá más grande).
Toda la luz está formada por campos eléctricos y magnéticos que oscilan en todas las direcciones perpendiculares entre sí, moviéndose juntos en una sola onda.
La luz es un fenómeno ondulatorio. La radiación electromagnética que forma la luz tiene dos propiedades básicas: campos eléctricos y magnéticos que oscilan en todas las direcciones perpendiculares entre sí, moviéndose juntos en una sola onda.
Esto significa que cuando se hace brillar una bombilla ordinaria en el aire, la luz sale de ella como una serie de ondas que se parecen a las ondas del agua cuando se deja caer algo pesado en ella.
La luz polarizada se produce cuando las vibraciones se limitan a un solo plano.
La luz polarizada se produce cuando las vibraciones están confinadas en un solo plano. Puedes ver la luz polarizada cuando miras un CD o un DVD a través de un filtro polarizador y notas que parece negro. La luz se polariza al pasarla por un filtro polarizador, que sólo deja pasar la vibración de una dirección.
La luz polarizada hace que las gafas de sol funcionen.
La luz polarizada es la que tiene vibraciones confinadas en un solo plano. En un ejemplo cotidiano, puedes ver la luz polarizada cuando cortas un trozo de película polarizadora en un cuarto de círculo y lo colocas entre dos luces: una quedará bloqueada y la otra brillará. Las gafas de sol polarizadas están diseñadas para bloquear determinadas frecuencias de luz (lo que las hace útiles para bloquear los dañinos rayos UV del sol). Las lentes de las gafas de sol polarizadas están hechas de un material especial que bloquea la luz transmitida en ángulos específicos, en concreto, la que se reflejaría en el agua u otras superficies.
Conclusión
Cuando se entiende cómo funciona la luz polarizada, resulta mucho más fácil comprender por qué funcionan las gafas de sol. Permiten al usuario ver con claridad al filtrar ciertas longitudes de onda de la luz que pueden dañar los ojos. Por eso, es posible que tengas que cambiar de gafas de sol cuando conduzcas de noche o de día, porque se necesitan diferentes tipos de lentes polarizadas en función de si el exterior está oscuro o iluminado.