¿Por qué tenemos hipo?

Durante mucho tiempo, los científicos no sabían por qué teníamos hipo. Ahora, sin embargo, tienen algunas ideas sobre la ciencia que hay detrás de este extraño fenómeno. He aquí algunas cosas que los investigadores han aprendido sobre el hipo:

El hipo se produce cuando el diafragma se contrae.

Quizá se pregunte por qué tenemos hipo. El hipo se produce cuando el diafragma se contrae. El nervio frénico envía señales al diafragma para que se contraiga, lo que hace que éste tire hacia arriba de los pulmones y las vías respiratorias. Cuando esto ocurre, se crea un vacío en el pecho que empuja el aire hacia la garganta y provoca el hipo.

El hipo puede deberse a una comida o bebida que irrita el revestimiento del estómago, pero también puede ser causado por el estrés emocional o la ansiedad por algo que haya sucedido recientemente en su vida. En algunos casos, el hipo es más grave que en otros: puede ser señal de un problema médico subyacente, como la enfermedad de reflujo ácido (ERGE), el asma o la acidez de estómago.

El nervio frénico indica al diafragma que se contraiga.

El nervio frénico es una rama del plexo cervical. Inerva el diafragma, que es un músculo que se contrae y relaja para crear los movimientos respiratorios.

El nervio frénico es un nervio mixto, lo que significa que tiene funciones sensoriales y motoras: envía señales del cuerpo al cerebro y también lleva señales del cerebro al cuerpo. El nervio frénico es también un nervio motor autónomo (otro nombre para este tipo de función) porque es responsable de contraer los músculos sin control consciente, en este caso, los músculos del diafragma.

El hipo no tiene ninguna utilidad conocida.

Este es un hecho importante que hay que recordar. El hipo no es un signo de una enfermedad grave y no es perjudicial. El hipo es la forma que tiene el cuerpo de eliminar lo que ha comido o bebido en las vías respiratorias para poder respirar. No pasa nada.

Sin embargo, el hipo puede ser muy molesto a veces. Si tienes hipo que no para, prueba estos consejos:

  • Bebe un vaso de agua a temperatura ambiente (no fría) y mantenlo en la boca durante unos 30 segundos antes de tragarlo. El acto de tragar desencadenará el reflejo del hipo y evitará que vuelva a producirse pronto.* Come o bebe algo ácido, como zumo de limón o vinagre con la comida (no bebas vinagre solo, a menos que quieras arriesgarte a quemarte el esófago). Si todo lo demás falla -y a veces esto sucede- pida a alguien que ponga su mano encima de la suya mientras presiona suavemente la zona del diafragma donde sabe que duele más al intentar no reírse de lo tontos que parecemos cuando sufrimos esta fase (¡ya sabe de quién hablo!).

La comida y la bebida, así como el estrés emocional, pueden provocar hipo.

El hipo suele estar provocado por la comida y la bebida. Los siguientes alimentos y bebidas pueden desencadenar el hipo:

  • El alcohol, especialmente la cerveza y el vino.
  • Bebidas que contienen cafeína, como el café, el té, las bebidas energéticas o los refrescos de cola
  • Bebidas carbonatadas (refrescos) y alimentos que contienen gas carbónico (como el champán)
  • Alimentos picantes, ácidos o que contengan vinagre, como los pimientos picantes, así como los cítricos, como los limones o las limas. El hipo también puede ser provocado por alimentos grasos como los batidos. Los alimentos salados también pueden provocar hipo en algunas personas.

El hipo puede ser un signo de algo más.

El hipo puede ser un signo de algo más. El hipo puede deberse a una enfermedad o problema de salud subyacente, como un tumor cerebral (muy poco frecuente), tuberculosis, asma, insuficiencia renal y otras afecciones. Si el hipo dura más de seis meses y no se asocia a ningún otro síntoma (como pérdida de apetito o de peso), es importante que el médico lo examine para descartar problemas de salud subyacentes graves.

El hipo también es frecuente en niños de entre dos y cuatro años. Suele ocurrir cuando tienen hambre pero no pueden comer todavía por el dolor de la dentición o por algún otro motivo, como tener demasiado calor/frío/cansancio, etcétera (yo no he sido). A los niños se les suele quitar el hipo al cabo de unas tres semanas; sin embargo, si su hijo tiene hipo de forma continuada durante más tiempo, consulte a su médico, ya que puede tener un problema de salud mental subyacente que debe tratarse urgentemente antes de que se convierta en adulto.

Todavía tenemos muchas preguntas sobre el hipo.

El hipo es un misterio. No sabemos por qué se produce, ni cómo detenerlo, ni qué lo provoca, ni cómo curarlo. Lo único que sabemos es que esta rareza médica ha existido desde hace mucho tiempo y que continuará asolándonos hasta el final de los tiempos, o al menos hasta que la ciencia encuentre una respuesta.

Conclusión

La próxima vez que tengas hipo, recuerda que es normal y que suele ser inofensivo. Puede ser frustrante tener algo tan molesto como el hipo, pero intenta no preocuparte demasiado por él: suele ser sólo un signo de otra enfermedad que necesita tratamiento. Si el hipo dura más de dos semanas o va acompañado de otros síntomas (como problemas para respirar), asegúrate de acudir a tu médico para que te evalúe.

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