¿Por qué hacemos servir la lengua para saborear la comida?

¿Por qué tenemos papilas gustativas en la lengua? ¿Por qué no saboreamos con la nariz o con los ojos? ¿Cuáles son las funciones de este órgano? En este artículo intentaremos responder a todas estas preguntas.

La lengua humana es una parte vital de nuestro cuerpo y la hace viva.

La lengua es un músculo que nos ayuda a masticar los alimentos. También nos ayuda a hablar y a tragar. La lengua humana tiene papilas gustativas, por lo que podemos saborear la comida y olerla.

De hecho, podemos llamar a nuestra lengua una “maravilla” porque esta pequeña parte organiza diferentes acciones con nuestra cavidad oral.

Efectivamente, la lengua es un órgano muy importante. Y se le puede llamar “maravilla” porque esta pequeña parte organiza diferentes acciones con nuestra cavidad bucal.

La lengua es un músculo que utilizamos para saborear los alimentos y pronunciar las palabras de nuestra lengua. El epitelio sensorial de su superficie detecta los estímulos gustativos de los alimentos y transmite impulsos al tronco cerebral por medio de los nervios situados en su base (nervio facial).

También sabemos que el sistema nervioso humano tiene muchos receptores para sentidos como el tacto, la audición y la visión que se distribuyen por varias partes de nuestro cuerpo, incluidas las membranas mucosas que recubren los órganos internos como el estómago o los pulmones; sin embargo, sólo hay dos tipos de receptores para el gusto, es decir los sabores dulce y salado, que se han localizado en las papilas situadas en la papila circunvalada, cerca del ápice de la lengua (donde sentimos la punta de la lengua), y en la superficie lingual anterior, cerca de los incisivos (donde sentimos la parte inferior), mientras que la sensación agria se produce debido a la concentración de iones de hidrógeno y no al contacto directo con las células receptoras, tal y como demuestran los experimentos realizados con técnicas de imagen como la resonancia magnética, etc.

No podemos imaginar la vida sin el sentido del gusto.

Probablemente esté familiarizado con los cinco sentidos: vista, oído, tacto, olfato y gusto. El gusto es uno de los cinco sentidos y ha sido estudiado durante siglos por los científicos interesados en cómo el ser humano percibe los distintos sabores.

Tenemos unas 9.000 papilas gustativas en la lengua que son capaces de detectar una variedad de sabores: salado (cloruro de sodio), dulce (sacarosa), amargo (compuestos amargos como la cafeína) y ácido (ácido cítrico). Además, hay receptores que detectan la textura -la textura abarca sensaciones como el crujiente o la viscosidad-, el contenido de grasa también es detectado por otros receptores, además de los que responden a sustancias químicas de los alimentos como el salado o el dulce.

Si una persona pierde su capacidad de distinguir los sabores, es probable que pierda el interés por la vida y tenga problemas emocionales.

  • La lengua es una parte muy importante de nuestro cuerpo, sirve para saborear los alimentos que comemos.
  • El sentido del gusto nos ayuda a evitar comer en exceso, y también evita que ingiramos sustancias nocivas como el veneno y las drogas.

La sensación del gusto nos mantiene a salvo de diversas toxinas y hace que dejemos de comer cuando estamos llenos.

La lengua es el único órgano que podemos utilizar para saborear los alimentos. Nos ayuda a detectar las toxinas, los azúcares, la sal y la grasa de los alimentos que ingerimos. Las papilas gustativas de la lengua nos ayudan a detectar estas cosas enviando señales al cerebro. Las toxinas son sustancias que se encuentran en la naturaleza y que pueden dañar o matar a los organismos vivos envenenándolos. Por lo general, no son venenosas para los seres humanos, pero pueden ser perjudiciales para los animales o incluso para las plantas si se consumen en grandes cantidades a lo largo del tiempo.

Los azúcares son hidratos de carbono (que incluyen almidones y fibras) que proporcionan energía a nuestro cuerpo cuando se digieren correctamente, por lo que es importante consumirlos en abundancia para gozar de buena salud, pero comer demasiado azúcar tendrá efectos negativos en el cuerpo si se consume regularmente a lo largo del tiempo, ya que provoca un aumento de peso que conduce a otros problemas como la diabetes y las enfermedades cardíacas, por nombrar sólo algunos ejemplos; por eso algunas personas intentan no comer nada de azúcar. Necesitas la sal, así como las proteínas y las grasas, porque juntos estos nutrientes constituyen la mitad del peso de tu cuerpo, así que sin ellos morirías muy pronto después de nacer”.

Así evitamos comer en exceso, lo que sería malo para nuestra salud.

Así evitamos comer en exceso, lo que sería malo para nuestra salud.

Al servir la lengua para saborear la comida, evitamos comer en exceso. Se puede pensar que este método permite comer más de lo habitual y sentirse satisfecho. Pero en realidad es peligroso para la salud porque conduce a la obesidad y a la diabetes, a las enfermedades cardíacas e incluso al cáncer.

Sin embargo, los científicos aún no tienen una respuesta definitiva a la pregunta de por qué las papilas gustativas están situadas en la lengua.

Sin embargo, los científicos aún no tienen una respuesta definitiva a la pregunta de por qué las papilas gustativas están situadas en la lengua. Podría ser porque la lengua es la única parte del cuerpo que puede moverse. La lengua es un órgano sensorial, por lo que tiene sentido que tenga papilas gustativas. La lengua también es un órgano motor, por lo que tiene sentido que tenga músculos.

Lo que sabemos sobre la percepción del gusto es que hay cuatro sabores básicos: dulce, ácido, salado y amargo (umami). Cada uno de ellos desencadena diferentes receptores en nuestra boca que envían mensajes a nuestro cerebro sobre los alimentos que estás comiendo para que puedas decidir si quieres más o menos de ellos.

También hay otra función importante de esta parte de nuestro cuerpo que no toda la gente conoce.

Puede que sepas que la lengua desempeña un papel en la degustación de los alimentos, pero ¿sabías que también desempeña un papel importante en la digestión? La lengua ayuda a trasladar los alimentos de la boca al estómago. También ayuda a tragar los alimentos y los líquidos, que pasarán a ser digeridos por los ácidos y las enzimas del estómago y el intestino delgado.

Por ejemplo, si se te atasca un caramelo entre dos dientes o muerdes accidentalmente algo muy duro (como una zanahoria) mientras intentas comerlo entero, ¡te puede doler muchísimo! Pero no hay que asustarse: basta con empujar suavemente el objeto con la lengua hasta que caiga en la boca, donde puedes escupirlo o tragarlo junto con un poco de saliva.

La lengua tiene músculos que nos ayudan a masticar los alimentos, a hablar y a tragar.

La lengua tiene una serie de funciones importantes. Nos ayuda a saborear los alimentos y a tragarlos, a hablar y a respirar. La lengua está formada por muchos músculos que pueden utilizarse de forma independiente o en combinación con otros para modificar la forma del órgano, lo que permite mover la boca mientras se mastica la comida.

La lengua humana es un órgano importante por muchas razones.

La lengua humana es un órgano importante por muchas razones. La lengua nos ayuda a degustar los alimentos y a percibir los sabores y texturas de lo que comemos. También nos ayuda a masticar los alimentos y a tragarlos correctamente para que puedan nutrir nuestro cuerpo con los nutrientes necesarios. Puede que la lengua no sea tan importante como el cerebro o el corazón, pero sigue teniendo una función vital para mantenernos vivos.

Conclusión

Hemos explorado las muchas formas en que la lengua humana nos ayuda a vivir. Es una parte de nuestro cuerpo sin la que no podemos imaginarnos la vida, pero la mayoría de la gente no conoce todas sus funciones. La lengua humana también tiene una forma y un tamaño inusuales, lo que nos facilita distinguir unos sabores de otros y nos impide comer demasiada comida de una vez.

Deja un comentario