La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) dio a conocer una noticia que ha despertado el interés del mundo entero. Se trata del asteroide 2009JF1 que podría impactar el planeta en marzo de 2022. Acá descubrirás más información acerca de La NASA alerta sobre asteroide que pasó cerca de la Tierra y que podría ser su objetivo en unos meses.
Uno de sus principales laboratorios, el Centro de Estudios de Objetos Cercanos a la Tierra (CNEOS), que con el transcurrir de los años ha volcado sus esfuerzos en vislumbrar la magnitud de choque con los asteroides Apolo, determina que uno de gran tamaño pasó cerca de la Tierra y que podría colisionar con ella el año entrante.
El quinto con más peligro de impacto
De acuerdo con los estudios realizados por el CNEOS, a lo largo de su existencia, el asteroide Apolo 2009JF1 tiene un grado de peligrosidad que lo ubica en el top 5 con mayor fuerza de contacto que podría colisionar con la Tierra porque ya estuvo muy cerca de su órbita algunos meses atrás.
La clasificación de los asteroides es bastante sistemática, puesto que en función de su peso, velocidad y dimensiones, es probable que el 2009JF1 sí llegue a chocar con el planeta en un periodo determinado.
Si bien estar en quinto lugar significa una alerta, los especialistas definen que su estado de colisión es -1 de 4166, una cifra discreta del daño que podría causar este objeto descubierto en mayo de 2009, acuñando su nombre a esta fecha reveladora para la NASA.
Los asteroides son elementos fundamentales del espacio, al tratarse de cuerpos celestes que circundan mediante órbitas. Algunos están más cerca del sol que otros, pero al estar alrededor de la Tierra, sí implica una inquietud para el CNEOS, al evaluar qué tan potente podría ser su choque con el planeta.
El 2009JF1 está a 375.587.595 km de la Tierra, cuya velocidad por segundo es de 18 km, realmente asombroso para tratarse de un cuerpo celeste que está cercano a la órbita del citado planeta. De seguir esa trayectoria, en poco tiempo estará muy próxima.
Cabe destacar que el grado de colisión es bastante bajo y realmente no supone un problema a futuro. El inconveniente es la cantidad de rocas calientes que caerán en la superficie, en forma de meteoritos. En cielos nocturnos es más fácil distinguirlos, aunque el ojo humano tienda a confundir este formato con estrellas simples que navegan con rapidez en el firmamento.
Misiones para atacar o desviar asteroides
Actualmente, la NASA está trabajando en una nueva misión para desviar el asteroide 2009JF1 y evitar que su colisión genere partículas dañinas para el ecosistema de la Tierra. Por ejemplo, la nave espacial DART será lanzada a mediados de 2021 para destruir el asteroide Dimorphos, mucho más peligroso que el anteriormente mencionado.
DART está respaldada por la Agencia Espacial Europea (ESA) como un proyecto ambicioso para concretar, en la medida de lo posible, el desvío de cada cuerpo celeste que represente peligro a la humanidad.