Vamos a intentar realizar un análisis de la teoría del Big Bang. Dado que es extremadamente complejo explicar físicamente qué es este fenómeno, no pretendemos impartir una clase magistral sobre el tema, sino dar unas pinceladas que ilustren a quienes no estén familiarizados con los conceptos de la física cuántica.
Qué es el Big Bang
El Big Bang es el nombre que recibe una explosión primigenia de dimensiones siderales, a partir de la cual se originó el universo que hoy conocemos.
Origen de la teoría del Big Bang
Desde los comienzos del siglo XX, varios científicos sugerían que el universo se encontraba en movimiento continuo. En 1929, Edwin Hubble, cuyo apellido da nombre al telescopio más potente del mundo actual, descubrió una serie de galaxias cuyo movimiento sugería que estaban alejándose de la nuestra.
No obstante, no fue hasta el año 1948 cuando el físico norteamericano George Gamow planteó por primera vez que el universo se había creado a partir de una gigantesca explosión, término que en inglés se denomina Big Bang.
En la década de los 60, el físico Stephen Hawking, basándose en los estudios gravitatorios previos de Albert Einstein, llega a la conclusión de que la teoría del Big Bang es la que mejor explica los movimientos de las galaxias pertenecientes al universo conocido.
Actualmente, es la teoría más aceptada para explicar los orígenes del Universo.
En qué consiste la teoría del Big Bang
¿Y qué es la teoría del Big Bang? Pues esta teoría explica que el universo surgió de una gigantesca explosión sucedida en un único punto inimaginablemente caliente y denso, hace más de 13 000 millones de años.
Hasta aquí puede ser más o menos fácil de entender. Pero lo malo es que esta teoría también afirma que la explosión no se produjo en un espacio que ya existía, sino que el propio espacio se generó a partir de la expansión y el enfriamiento posteriores a la explosión.
No solo eso, sino que, según la Teoría del Big Bang, el espacio continúa generándose hoy en día, ya que el proceso de expansión y enfriamiento no ha finalizado.
No nos pidas que te lo expliquemos mejor, porque no somos físicos cuánticos, no obstante, intentaremos darte algunos datos para que entiendas por qué esta teoría puede ser considerada cierta.
¿Por qué apoyar esta teoría?
La teoría explica la creación de los elementos más ligeros del universo, que son el hidrógeno, el helio y el litio y sugiere que todos los demás elementos se originaron a partir de estos. Eso también explica por qué la composición del universo conocido es tan uniforme.
Igualmente, la teoría del Big Bang explica los fenómenos que los astrónomos observan a través de los telescopios terrestres y espaciales, como el alejamiento de las galaxias visibles.
Y además, también da respuesta a la cuestión del resplandor cósmico captado en todo el universo. Aclaremos que resplandor cósmico es el nombre que se da al calor residual que aún queda en el universo tras la explosión inicial.
En resumen, se trata de una explicación notablemente convincente de cómo surgió el universo observable.
Y una cosa más: resulta que no existe ninguna otra teoría que pueda explicar mejor el origen del universo.
Si el Big Bang es el comienzo, ¿cómo será el final del universo?
El concepto original del Big Bang no explica si el universo continuará expandiéndose y enfriándose o si acabará contrayéndose hasta llegar a una situación similar a la previa a la gran explosión.
El destino final del universo depende de las propiedades de dos misteriosos fenómenos conocidos como materia oscura y energía oscura. Cuando se conozcan mejor esos fenómenos, podremos saber si el universo terminará siendo hielo o volverá a convertirse en fuego.
¿Qué es la materia oscura?
Toda la materia que conocemos (nuestro sistema solar, las galaxias y el gas interestelar) representa solo una sexta parte de la masa del universo.
Pero los científicos pueden comprobar que existen efectos físicos que son causados por una masa del universo que no conseguimos detectar. A esa masa oculta surgida tras la gran explosión la denominan materia oscura y se sabe que existe porque su presencia en las galaxias hace que estas giren más rápidamente que si solo hubiera materia normal.
Adicionalmente, la materia oscura produce desviaciones perceptibles en los haces de luz proveniente de distancias muy remotas.
Pero hoy en día, la naturaleza de la materia oscura sigue siendo todo un misterio para la ciencia.
¿Las observaciones de los astrónomos confirman la teoría del Big Bang?
Cuando los astrónomos miran a través de un telescopio, en realidad están mirando hacia atrás en el tiempo. Lo que captan son reflejos de la situación donde estaban las galaxias y estrellas hace millones de años.
Por ejemplo, la galaxia de Andrómeda es vista tal y como era hace más de 2 millones de años, porque ese es el tiempo que ha tardado la luz de la galaxia en viajar por el espacio hasta la Tierra.
Pero otras galaxias están mucho más lejos en el espacio y en el tiempo: el telescopio espacial Hubble puede visualizar la luz de galaxias que tienen más de 13 000 millones de años y que se formaron poco después del Big Bang.
De esta forma podemos hacernos una idea clara de cómo era el universo primitivo y lo cierto es que esa disposición espacial que observamos coincide con la teoría de la gran explosión.
No sabemos si te habrá quedado más o menos claro qué es la teoría del Big Bang y si visualizas lo que hemos querido explicar. Lo cierto es que a nosotros también se nos hace complicado entender los entresijos de esta teoría. Pero la mayoría de los científicos actuales coinciden en avalarla y cuando el río suena es porque agua lleva, así que nos inclinamos por darla por buena.